viernes, 28 de septiembre de 2012

Reflexion absurda sobre como combatir la crisis


En el transcurso de mi vida profesional me di cuenta que unos que se consideran grandes profesionales, que creen tener grandes responsabilidades, y que tienen grandes aspiraciones se consideran así por tener grandes presupuestos y consideran un menosprecio cuando se les recortan estos (por la mera pero legítima y vital lógica de cuadrar una cuenta de explotación). Cómo si fuese algo debido o un reconocimiento.

Capacidad a gastar y fichar más, muchos la tienen.

Bien, yo considero que el gran profesional es el que sabe optimizar sus recursos para que su departamento cumpla su cometido, según los KPIS que se le mida en cuanto a aportación a la actividad de la empresa. Y si tiene que recortar lo hará correctamente, con astucia, en coherencia con una estrategia y una visión, respondiendo al nivel de calidad esperado (ni más, ni menos). Es uno de los motivos por los cuales es un gran profesional.

Conclusión, si lo que considero no cuadra con como unos se consideran, hay que emplear pequeños profesionales en las oficinas, y fichar a los mejores comerciales. Menos a quién les gusta gastar y más que sepan vender. Ya me cuadran las cuentas.

viernes, 13 de abril de 2012

El acierto y el error de la Piramide de Maslow por omisión

No voy a presentar y desarrollar la pirámide de Maslow que sería como leer Molière con la capacidad de énfasis de Mariano Rajoy: todo está dicho en calidad y sobre todo en cantidad.

Esta semana, de camino a casa en el embotellamiento habitual, mi momento predilecto de desatascamiento cerebral, me hice la reflexión siguiente: la pirámide de Maslow como dibujo estático tiene un acierto y un error por omisión, por su condición de objeto único y por su calidad estática.

    
     1- Condición de objeto único: nunca veréis una pirámide de Maslow representada en un entorno, con otros objetos, o simplemente con otras pirámides de Maslow. Acierto.

No existe una pirámide de Maslow, sino tantas como individuos en este mundo. Sin embargo no se pueden representar juntas. Su dibujo se presenta como algo universal (es la misma para todos), pero si bien los conceptos (Necesidad, Seguridad, etc.) son comunes para cada uno, los ejemplos no lo son. Cada uno tiene su marco de lectura y no tiene que ponerlo en duda por la pirámide del vecino.

En la comparación, se pueden vivir regresiones, o frustraciones en su pirámide de Maslow propia, pero objetivamente no tiene que ser así, es un principio de equilibrio. Con lo cual representarla junto a otras sería poner en duda esta teória por motivos erróneos y subjetivos: para uno, es única.


     2- Calidad estática: no se inscribe en el tiempo. Error.

La pirámide vive alteraciones en el tiempo. Si bien lo anterior tenía un carácter onírico, eso es algo ineluctable. Es objetivo. Las necesidades básicas no son las mismas con 10 que con 70 años.

Si bien ya no se puede ver como un desencadenamiento secuencial de etapas una vez cumplido una etapa, sino como un cuerpo en mutación en la línea cronológica de cada individuo, o de cada familia si esta lleva un bagaje socio-cultural importante.








Tener recelo y Confiarse

La persona recelosa tiene que hacer las cosas escuchando su criterio para no equivocarse. Si no, no hace nada.

La persona confiada tiene que hacer las cosas después de una reflexión prudente. Sino hace las cosas equivocadas.

sábado, 24 de marzo de 2012

Estado anímico en el trabajo

Todos vamos buscando la motivación en el trabajo. Pero la motivación no es ni tiene que ser el fin, sino un motor, o gasolina si preferís. No hay que correr tras ella. Puede hasta desmotivar y generar desesperación. Todos los gurús de la comunicación tendrán 1 000 teorías sobre la motivación y muchas de ellas se asemejarán seguramente más a técnicas de autoayuda que a un fundamento profesional.

La motivación va y viene. El profesional no se valora y no debe valorarse por su motivación, sino por su aportación a la organización, por su fidelidad a ella, y por su involucración.

A caso valoráis vuestra pareja por su motivación a quereros?

Pero qué pasa cuando ya no está? Abandonamos? Tenemos que cambiar de barco, poner todo en tela de juicio, ir a buscar ayuda, mandar todo a la mierda, buscar explicaciones internas, buscar excusas fuera y entrar en juegos de acusaciones consentidas con su circulo más cercano?

Cuando la motivación se va entran en juego las convicciones y los valores. Hacemos las cosas porque hay que hacerlas, hacemos las cosas como pensamos que hay que hacerlas, seguimos palante porque es lo que creemos que es lo propio.

En este peldaño del proceso podemos gracias a la constancia y a la no traición de nuestros valores volver naturalmente a la motivación.

También puede pasar que por la situación, por la coyuntura personal o externa, por situaciones interpersonales que las convicciones y los valores ya no sean suficientes. Pasamos entonces en la fase de aguante. Ahí es muy fácil: aguantar. Nada más fácil: no hay nada más que hacer. Es ahí que pensamos en cosas como: por mucho madrugar no amanece más temprano, o mejor los malo conocido que lo bueno por conocer, o después de la tempestad la calma, etc. En fin: quedate de pie, recto y la cabeza bien alta.

Y luego qué? Pues eso: después de la tempestad la calma. El sol se levanta cada mañana y vivir es acumular días.

Las cartas ya cambiarán y la motivación volverá.



La motivación es un gasto, se consume.
Los valores son inversiones que nuestros padres hicieron.
El aguante es ley de vida.

viernes, 3 de febrero de 2012

La amortización del político

Entre una y otra cosa importante de una jornada laboral intensa, o sea a la hora de la cerveza, mi compañero de bocadillo calificó a Rubalcaba de amortizado. Que símil tan pragmático y acertado! Porque no se me había ocurrido antes? (quizás porque me lleva unas cuantas reflexiones de ventaja…)

Así que vamos a desarrollar esta constatación económico-política. Comparemos la inversión al político.

Los partidos políticos necesitan invertir en el humano. Es su mejor activo. Es su corazón de oficio. Si se activarán unos partidos tendrían un valor de reventa más altos que otros, seguramente, y todos tendrían activos tóxicos, por seguro!

Unas de esas inversiones darían un retorno, otras no.

Una inversión tiene 3 naturalezas:

  • Inmaterial
  • Material
  • Financiera


La inmaterial es la más sana en la política, es la materia gris, es también la voluntad de cambiar o seguir, mejorar o continuar lo bueno, la actividad y la proactividad. Aquí están los políticos que buscamos.

La material es la más patética, es el político que llega a tener responsabilidades por su familia, es la política que tiene un cargo por su condición de mujer, es el que ha conseguido algo por la calidad de su enjuague bucal y de su dentista.

En la financiera no encontraremos a muchos políticos (nota: no me estoy refiriendo a sobornos cómo habréis entendido…) sino a sus mecenas.


Una inversión tiene 4 grandes fases de vida:

  •  La adquisición
  • La puesta en marcha
  • El periodo de vida
  • La baja


Adquisición
Todo proceso de adquisición que se respete tiene una etapa previa de investigación de la oferta y de licitación. Pongámonos desde el punto de vista del partido político. El partido político por preocupación de perennidad de su organización e ideología tal un club de fútbol busca los mejores fichajes. El PP, por ejemplo, buscará en círculos privados jóvenes estructurados, rectos, bien pensantes, planificados, enfocados. El PSOE es más de manifestaciones callejeras, dónde podrá encontrar las mentes más avanzadas en terminología de derechos humanos, defensa del medio ambiente, avances sociales, igualdad.
(Leerlo con una pisca de sarcasmo…)

Puesta en marcha
Al Joven del PP se le hará concejal y se la dará una tarjetita distintiva para que se pueda relacionar con empresarios para que les explique que es concejal mientras les explica la vida. El del PSOE por desgracia tendrá que seguir con trabajo callejero durante una temporada más.

El periodo de vida
Luego hablaremos de la amortización. De momento, lo único que diremos es que con las tortas que se mandan cada semana a la cara, no me cuesta la comparación con el desgaste de un activo material.


La baja:

Ahí tenemos distintas casuísticas:
  •  La de las dictaduras bananeras, o de la vieja Francia: la baja es irreversible por la muerte del bien
  • La de los incompetentes, de la España de Zapatero:  se da de baja antes de amortización
  • La no acumulación, legislada, de mandatos (no superior a 2 mandatos): las bajas respetan una frecuencia y duración determinada, los planes son más fáciles de hacer, la alternancia garantiza una evolución permanente



Ahora veamos la amortización:

·         Amortización lineal: es el político de segunda línea, el trabajador, constante, riguroso, es el que realmente trabaja el sistema. No es el protagonista, sería más bien el productor ejecutivo.

·         Amortización decreciente: cuanto más pasa el tiempo cuánto menos amortizamos. Ahí encontramos las jóvenes promesas, los precoces. Tenemos un compatriota deportista que ilustra bien esto: Fernando Alonso. Por lo muy desquiciante que resulta (se parece a Calimero), ganó muy rápidamente pero es bueno, sigue dando resultados, menos, pero es un valor seguro.

·         Amortización creciente: aquellos políticos incomprendidos (muchas veces por incomprensibles) bien porque encuentran una segunda juventud, bien por las circunstancias. Este sería el caso de François Hollande (del cual hablamos de favorito para las elecciones francesas cuándo no tuvo ninguna cartera significativa de gobierno en su vida, os suena de alguien?).


Plazo de amortización:

Luego interviene la decisión del o de los que manejan las cuerdas, del o de los titiriteros (en la empresa sería el director financiero que con buenos criterios elegirá la mejor opción o estrategia). En este caso el simili es el plazo de amortización. Cuántas veces hemos visto partidos proponer  candidatos dar por perdidas elecciones para no quemar a un potencial o un valor seguro? Es el caso de Zapatero, lo único es que se les salió el tiro por la culata: no contaron con las pifiadas de Aznar y el hombre se quedó 8 años con el balance que se le conoce. Bis repetita con Rajoy?



En fin, si un político es amortizado, por mucho mantenimiento curativo, de mejora, o de alargamiento de la vida del activo (también activables y amortizables), es mejor pasar página, agradecer, dar galardones, lo que sea y abrirse a la evolución, preparar (y no decretar) el futuro, aceptarlo.

viernes, 20 de enero de 2012

Reunión cortita

Tengo 2 técnicas para acortar las reuniones: ponerlas justo antes de la hora de la comida, así tienen un fin, o justo después del desayuno, así los demás le ponen un final, porque:


De qué padeces?

El simpático es el soplapollas

El apático es el que sonríe, o no, y no se pregunta porque

El empático es el que se pierde en lo que piensan los demás

El antipático es el que tiene 2 problemas: él, y los demás


Qué tipo de patético eres tu?

viernes, 6 de enero de 2012

Reflexión sobre la implicación del empleado en su empresa

Las nociones de fidelidad a su empresa y de compromisos han cambiado mucho hoy en día. Hasta hace nada más que unos 15 años, prevalecía la permanencia durante muchos años en una misma empresa, no era raro ver a empleados con 20 años de antigüedad, empleados que habían conocido 2 o 3 empresas en su carrera profesional.

No es que hoy en día ya no se vea. Pero la cosa ha cambiado mucho. Este artículo trata el caso de los mandos y potenciales.

Hoy en día el joven mando ve su contrato de trabajo como un jugador de fútbol ve su contrato que le vincula con su club. Hoy en día los Raúl son más bien pocos. No pasa nada si uno juega en un club hoy y en otro mañana. Está aceptado. Y en esta materia los 2 actores son responsables de esta evolución:

  • Los empresarios buscan el talento fuera.
  • Los talentos buscan la oportunidad fuera.

Eso en cuanto a los actores, pero también podemos encontrar otros motivos:

  • Los ciclos de la economía:
o   Los periodos fastos:
§  Facilitan la movilidad. Es como una bolsa (de hecho se habla de bolsa de empleo): hay mucho volumen de transacción, puestos que se liberan, ocupan, crean, etc.
§  Y también la estabilidad: se puede entrar en empresas de provenir y aspiramos a niveles profesionales o de renta a los cuales no hubiéramos podido acceder si no es gracias a la promoción interna.

o   Los periodos de crisis:
§  Facilitan la estabilidad: uno no quiere jugar a los malabaristas del empleo en tiempos de incertidumbre.
§  Y también la movilidad “diferida”: el paro aumenta y fuerza por la misma ocasión el cambio de empresa, lamentablemente con meses o años de plazo, plazo llamado “paro de larga duración”


  • La formación: consecuencia de la escritura, el humano está en constante proceso de progreso. Mejora su conocimiento y su saber hacer. Y eso le abre nuevas puertas.

  • La comunicación: por la comunicación todos tenemos ahora más conocimiento de distintos sectores de actividad, oficios, y empresas. Eso nos abre el campo de visión. Sabemos saltar de un sitio a otro: ni nos da miedo ni tenemos la sensación que solo existe lo nuestro.

  • El desarrollo de las relaciones: viva el networking y las tarjetas de visita. Muchos se han hecho verdaderos expertos del tarjetero, y todos nos hemos metido un mínimo en ello, eso es la ley de la jungla. Eso es como un chico en una fábrica de perfiles de aluminio, si se liga a la recepcionista mona hará todo lo necesario para no soltarla. La película cambio si trabaja en una empresa de azafatas de imagen.

En esta evolución, el compromiso moral ya no es hacía el otro sino hacia sí mismo: si uno se compromete no es por cómo se siente vinculado o por el sentimiento de pertenencia sino por no fallar al nivel profesional al cual quiere que se le valore. Juega también mucho la presión del boca a boca: “que se va a decir de mi”, “el mundo es un pañuelo”, “necesito una recomendación”, etc.

No estoy haciendo la apología del altruismo hacia su organización. Es una simple constatación. Ser de naturaleza comprometida o no tiene en ambos casos ventajas e inconvenientes tanto para el empleado como para la empresa.

Por lo que me toca soy más de la antigua escuela. Creo que el compromiso con su empresa corresponde a mi naturaleza y a mis necesidades. Pierdo oportunidades? Puede ser, pero ir de flor en flor puede costar mucho a la larga, la caída puede ser dolorosa, y coño: las oportunidades existen también en casa...

El oportunismo no viene a validar y recompensar la involucración, las aptitudes, el profesionalismo. Viene a recompensar el que tiene el ojo para meterse en el buen hueco. Pero las posibilidades de equivocarse aumentan y no da ninguna arma al interesado cuando los tiempos se hacen difíciles, estos no siempre son las grandes crisis, pueden llegar en cualquier momento.

La constancia, el rigor, el trabajo, la involucración son cualidades que pagan. Las empresas son no son plazas de toro, son campos de batalla. No hay que torear: toreando uno no gana nada, solo evita la corneada. Hay batallas, no todo son flores, en el mismo bando hay gente que cae bien y otra no tanto, hay momentos de trabajo intenso y otros de reposo, hay dificultades y pequeñas glorias, en definitiva hay de todo excepto facilidades y no hay sitio para la falsedad: mejor una buena bronca.

Ahora bien: hay una estrategia, una visión común, un mismo objetivo que tendrá sus rectificaciones y sus errores de camino. De ganar pequeñas batallas y perder unas cuantas, se busca ganar grandes batallas para pasar a ganar la guerra. La única diferencia en la empresa es que la guerra tiene un fin, en este caso esperemos que no J. Ese es el mundo de la empresa. Y que gusto vivirlo cuando se llega a hacer bien las cosas. Y para ello mejor estar bien enraizado, con convicción, en su bando.

Dónde está el gusto de este compromiso en esta batalla? En los contratos que se consiguen, en el ojo de la competencia que nos reconoce, en la perennidad de la empresa, en el reconocimiento mutuo empresa / empleado, en los proveedores que valoran a la empresa como un buen partner, en haber batallado por lo que se quiere, entero, sin mascaras, en el momento en el que el equipo se para y mira hacia atrás para ver todo lo que se ha mejorado y construido.

Este sentimiento de pertenencia a este todo es realmente bueno, alentador, fuerte.

Y si alguien se pregunta después de todo este rollo si soy de buena habla, la respuesta es: NO. Soy, áspero, imperfecto incorregible, muy duro conmigo mismo, pero muy involucrado. No soy un campeón del mundo de la comunicación especialista de la escoba o de echar balones fuera.

Aquí dejo una pregunta: tus colaboradores encuentran satisfacción y excitación en conocer más de su oficio? Se interesan por el producto de la empresa?

Una imagen para no olvidar

Una imagen vale más que 1 000 palabras. Así que esta vez me callaré.

Nagasaki antes y después de "Fat Man"

domingo, 1 de enero de 2012

Visión ecologíca antes de hora: Felipe Segundo

Felipe Segundo:

"Una cosa deseo ver acabada de tratar, y es lo que toca a la conservación de los montes y aumento de ellos, que es mucho menester y creo que andan muy al cabo. Temo que los que viniesen después de nosotros han de tener mucha queja de que se los dejemos consumidos y plegue a Dios que no lo veamos en nuestros días".

Esta situación se puede ver en una placa sellada en la silla de Felipe Segundo.


http://eldescampado.blogspot.com/2012/01/vision-ecologica-antes-de-hora-jfk.html

Visión ecologíca antes de hora: JFK

John Fitzgerald Kennedy:


"Las palabras huecas y las resoluciones débiles ya han fallado. Es la hora de la revolución energética. ¿Miraremos a los ojos de nuestros hijos y les diremos que tuvimos la oportunidad, pero no el coraje? ¿Miraremos a los ojos de nuestros hijos y les diremos que teníamos la tecnología, pero carecimos de visión?"

http://eldescampado.blogspot.com/2012/01/vision-ecologica-antes-de-hora-felipe.html